La mejor forma de iniciar este artículo es comenzando por definir el término outplacement. Este concepto no cuenta con una traducción literal al español, no obstante, hace referencia a la «desvinculación» laboral o al programa de desvinculación asistida. Por lo tanto, es un proceso de asesoría, apoyo, orientación y capacitación dirigida a la persona que será desvinculada y a las empresas para mejorar la productividad de manera positiva.
Actualmente las empresas están presentando diversos desafíos, para optimizar sus recursos internos y hacer frente a la crisis económica. Las organizaciones se han visto sumergidas en situaciones de rápido desarrollo tecnológico, necesidad de competitividad, creciente introducción de internet, internacionalización de las economías, procesos de fusiones y adquisiciones. Luego de estos procesos de reestructuración, el empleo ha llegado a un momento crucial.
Además, en la actualidad, la mayor parte de la vida de las personas está basada en el trabajo. El empleo se distingue por aportar estabilidad económica y social que necesita todo individuo para lograr auto realización. La pérdida de esa fuente de ingresos, por causas ajenas a su voluntad, trae consigo consecuencias considerables sobre todo emocionalmente. La persona puede sufrir ansiedad, estrés, afectaciones en su autoestima, sentimientos de culpa, frustración, entre otros.
En adición, las consecuencias pueden afectar el círculo cercano de la persona, más específicamente en su familia. Estos efectos pueden llevar a tensiones, relaciones frías y distantes entre los seres más queridos. La pérdida de trabajo es considerada por los especialistas como uno de los eventos vitales más difíciles y complicados que pueden experimentar los individuos. Además, es importante destacar que este proceso puede afectar el clima laboral de la empresa.
Los trabajadores que quedan en la organización pueden sufrir ansiedad por no saber cuál será su situación en un futuro no necesariamente lejano. Esto puede llevar a una baja productividad y al posible deterioro de la imagen de la organización. Un proceso de reestructuración que lleva a despidos no es un momento fácil o agradable para los actores involucrados. Es por eso por lo que se requiere de una empresa de consultoría en talento humano para gestionar correctamente este procedimiento.
A causa de esto, se han desarrollado diversas estrategias efectivas de apoyo y orientación, con el propósito principal de facilitar la búsqueda de nuevos empleos, desarrollando las habilidades de los colaboradores para su empoderamiento, reduciendo el tiempo de desempleo que sufre la persona que ha sido desvinculada de una empresa. La evolución de estas estrategias ha llevado a considerar la desvinculación o despido como una parte fundamental del ciclo profesional determinado por condiciones socioeconómicas y no un acto totalmente aislado.
El outplacement es conocido como el proceso de apoyo u orientación para la desvinculación o la desvinculación asistida. Esta surge cuando una organización rescinde la situación y el vínculo laboral que hay con el empleado y decide llevar a cabo un programa específico que sea diseñado para que logre incorporarse en el menor tiempo posible al mundo laboral.
Importancia del outplacement
La recolocación se usa ampliamente dentro de las organizaciones, especialmente en el área de recursos humanos. Esta terminología está relacionada con el procedimiento de la empresa para brindar asistencia a un empleado que ha sido despedido. De esta forma, la organización los preparará para su reintegración al mercado para que puedan conseguir un nuevo trabajo más rápidamente. Con ello, la empresa blinda su imagen institucional ante comentarios negativos por el despido.
Esta es una herramienta innovadora y reciente que permite gestionar los recursos humanos de manera óptima, que ha sido diseñada para responder a los diferentes problemas que surgen como consecuencia de la desvinculación de los trabajadores. Además, ha sido un instrumento ideal para regular el mercado laboral. A través del outplacement los empleados reciben información actualizada sobre el mercado laboral y asesoría para desarrollar mejor su perfil profesional, tales como:
- Construir o reestructurar el plan de estudios de manera atractiva y objetiva.
- Analizar la red de contactos del colaborador y seleccionar los nombres que podrían beneficiarlo en su reubicación.
- Realizar pruebas para identificar habilidades a desarrollar o mejorar.
- Participar en conferencias sobre carrera y mercado laboral.
- Contar con asistencia psicológica que le ayude a superar esta fase de transición.
- Estudiar la carrera definiendo una nueva área de actividad, abrir un negocio, entre otros.
- Buscar empresas que coincidan con su perfil profesional y que puedan admitirlo en su equipo.
¿Cómo funciona una asesoría de desvinculación?
El proceso de recolocación tiene, básicamente, tres fases. Cada uno de ellos consta de varias actividades. ¡Continúen leyendo!
Planificación
La recolocación comienza con la planificación, que involucra tanto al área de RR. HH. de la empresa como a la consultoría especializada. En esta fase se definen las acciones a realizar para minimizar los efectos del despido en los empleados.
Desvinculando
Luego viene la etapa de desconexión, en la que se informa al empleado del cese y sobre los motivos que llevaron a la empresa a tomar esta decisión, siempre de forma clara y sin omitir información.
Desplazamiento
El último paso es la propia recolocación, un proceso que ayudará al empleado a buscar un reemplazo en el mercado, con apoyo a través de conferencias, capacitaciones, apoyo emocional y todo lo que sea necesario.
¿Cuáles son los métodos utilizados y los beneficios para la empresa?
Algunas empresas tienen dificultades para afrontar el proceso de despido de un empleado, más aún si se trata de un profesional de nivel ejecutivo. Después de todo, el trabajador puede sentirse injusto con su despido, ya que ha dedicado todo su tiempo y esfuerzo durante muchos años.
La situación se complicaría si esta mala impresión hiciera que el exempleado hablara mal de la institución a otros trabajadores, lo que podría afectar la imagen de la organización. Cuando la empresa contrata servicios de recolocación, revierte ese hecho. A pesar de ser despedido, el exempleado se siente cuidado y respetado por la institución porque la recolocación lo ayudará a:
- Preparar su currículum.
- Prepararse para participar en los procesos de reclutamiento de personal y selección.
- Planificar estrategias para su difusión en el mercado laboral.
- Realizar el análisis y revisión de su trayectoria profesional.
Luego de todo este apoyo, el trabajador se marcha confiado y satisfecho con la empresa porque adquirió importantes consejos, asesoría y capacitación para lograr un reemplazo profesional. Con eso, podrá conseguir un nuevo trabajo más rápido de lo que esperaba. Por tanto, no se sentirá abandonado ni sufrirá los efectos psicológicos y económicos del desempleo.
Otra ventaja de la recolocación es el fortalecimiento de la imagen de la empresa, que ayuda a los empleados despedidos a buscar nuevos puestos de trabajo, cumpliendo un rol social relevante. Esto actúa de manera muy positiva en la imagen institucional de la marca ante los empleados y su público externo, valorando la organización.
La empresa también puede beneficiarse de la sustitución, en la medida en que sea capaz de realizar una política interna que favorezca a los profesionales de alto desempeño que buscan empleo. De esta forma, las empresas y organizaciones que brinden este tipo de servicio pueden canalizar talentos del mundo corporativo a las empresas pertinentes. En GSH les ayudaremos a que juntos abracemos el cambio.
Además, se facilita el proceso de atracción selección del personal, ya que, en lugar de buscar trabajadores, se dirigen a la empresa. Lo mejor de todo, con la orientación adecuada por la organización. Una empresa que logra implementar servicios de reubicación y reemplazo construye una buena reputación en el mundo empresarial. Además de impulsar la competitividad en la compañía.
¿Cuándo contratar este servicio?
Antes de decidir contratar servicios de reubicación y reemplazo, la empresa debe evaluar:
- Si el empleado contribuyó eficazmente a la empresa y tenía una buena competencia de comportamiento.
- El motivo de la rescisión.
- Si la organización le hizo una buena propuesta al empleado cuando estaba trabajando en otro lugar y lo sacó de allí para trabajar para ella.
- Si el despido es parte de una reestructuración de eventos o cargos en la organización o se debe a la crisis económica, entonces la consultoría reducirá los impactos del despido masivo.
La consultoría contratada como GSH se encargará de evaluar cada caso de empleados que serán despedidos, analizar sus perfiles y actuaciones profesionales para que consideren la relación entre el desempeño del empleado, el escenario de la empresa y los motivos del despido. Nosotros les brindamos la asesoría pertinente para realizar el proceso de una manera humanizada y que permita empoderar a sus empleados.
Cuando una empresa necesita un profesional con un perfil específico, es muy importante contratar servicios de sustitución. Los especialistas podrán ofrecer una lista de profesionales que están distribuyendo currículums y buscando oportunidades, para que la organización pueda encontrar el empleado adecuado para la vacante que ofrece. Las empresas que trabajan con este servicio ayudan a los profesionales de todos los niveles a volver al mercado con el asesoramiento para el desarrollo de sus habilidades.
En GSH nos hemos caracterizado por realizar la asistencia adecuada del outplacement para empresas de gran importancia en el país con resultados positivos y favorables para todos los actores involucrados. Ese acompañamiento puede extenderse tiempo después para brindarles las herramientas necesarias a las personas que necesitan hacer un cambio de carrera. Nosotros buscamos la armonía para que los impactos negativos de ambas partes se reduzcan considerablemente. Para más información y contratar nuestro servicio, les invitamos a que nos llamen a la línea (1) 2120 777.